Cerca de la “celebración» del Día mundial de las personas refugiadas estamos presenciando noticias que confirman la falta de respuesta de Europa ante esta realidad y la vulneración de derechos a la que están expuestos las personas.
El domingo, los medios de comunicación alertaban sobre la negativa a acoger en el puerto de Malta a un barco de rescate con más de 600 personas, entre ellos 123 menores a bordo. El gobierno italiano está comenzando a cumplir sus amenazas ante el tema migratorio, con el cierre de fronteras y la expulsión de personas en situación irregular del país. En este caso, rechazar un barco de ayuda humanitaria viola tanto los artículos 2 y 3 de la Convención Europea de Derechos Humanos, que exigen prestar asistencia a personas que requieran urgencia sanitaria o elementos de primera necesidad, así como la prohibición de una expulsión colectivo ante el riesgo de ser beneficiarios de protección internacional.
Ante esta situación, el nuevo gobierno español decidió acoger en Valencia a los dos barcos de las ONG Médicos sin Fronteras y de SOS Mediterránée. Una decisión que aplaudir que, sin embargo, deja la preocupación y el riesgo de que prácticas xenófobas como las de Italia se extiendan a otros países europeos.
Por eso, es necesario necesario la denuncia e incidencia social. Desde Red Íncola apoyamos dos iniciativas para los próximos días en Valladolid donde reivindicaremos el trato digno para todas las personas migrantes, el cumplimiento de los derechos de asilo y refugio, y la construcción de Hospitalidad en la sociedad.
– Concentración Círculos de Silencio con el lema “Huyen para vivir, ¡acojámosles!”, el viernes 15 de junio a las 20h en la plaza Fuente Dorada.
– Marcha “Caminos de Hospitalidad” el 21 de junio. A las 17:30 será la acogida en la Plaza Mayor, y caminaremos con y por las personas migrantes y refugiadas hasta INEA.