Esta mañana, 4 de junio, se ha presentado el Informa Anual CIE 2020 del SJM España. Un análisis de la difícil situación en los Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE) con especial atención a la insuficiente atención sanitaria. Donde se advierte y justifica la sinrazón de mantenerlos abiertos, y se plantean, entre otras medidas, la suspensión de los internamientos.
El informe se ha presentado con un acto en el Senado. Los CIE cerraron sus puertas ante la declaración del estado de alarma en marzo de 2020, de una forma inicialmente descoordinada y caótica, aunque luego se percibió el fundamento jurídico y las decisiones claras de la Policía y de la Fiscalía. Sin embargo, una decisión política ilógica que tomó la vía represiva motivó su vuelta a la actividad a partir de septiembre, con insuficientes medidas preventivas anti covid y aislamientos severos para personas contagiadas, con el consiguiente clima de angustia y ansiedad para los internos.
En 2020 fueron internadas en CIE un total de 2.224 personas, la gran mayoría (79%) por motivos de devolución tras entrada irregular, seguida de motivos de expulsión (16%). 42 menores fueron identificados, casi un 2% del total de internos, una cifra demasiado elevada pero inferior a la real, ya que pone en entredicho la fiabilidad de las pruebas de determinación de la edad. 766 personas solicitaron asilo y 84 fueron aisladas de forma preventiva.
Un dato importante refleja el innecesario sufrimiento al que se somete a las personas internas: del total de personas devueltas en España (1.904), solo un 28% lo fueron desde CIE, así como del total de expulsiones (1.835), un 38% desde CIE. El 47% de los internados fueron finalmente puestos en libertad por diversos motivos al no poder ejecutarse su repatriación forzosa.
El informe profundiza en una serie de derechos que han sido objeto de tutela judicial y que es preciso garantizar en la práctica. Entre ellos la instrucción exhaustiva ante denuncias de torturas y tratos degradantes e inhumanos; la detección de perfiles de protección internacional o de menores de edad; o la posibilidad de la simple multa por estancia irregular. Ante esta vulneración de derechos, que se suma a las ya continuadas, como la deficiente atención sociocultural, jurídica y sanitaria, las visitas de las diferentes ONG se hacen más importantes que nunca. Los equipos de visitas a CIE de SJM pudieron realizar su trabajo normal hasta la declaración del estado de alarma y el consiguiente cierre de los centros, pero al retomarse el internamiento, solo en Madrid han podido continuar la labor.
En el horizonte próximo se dibujan proyectos de obra en CIE que denotan una clara apuesta política por el internamiento y la vía represiva. Se confirma el proyecto de un nuevo CIE en Botafuegos, Algeciras, con una inversión de casi 27 millones de euros entre 2021 y 2024.
En Red Íncola nos al compromiso del SJM, al que pertenecemos, reclamando una vez más el cierre de los CIE y la búsqueda de otras alternativas jurídicas y políticas para las personas que caen en la irregularidad. Las propuestas conclusivas señalan la necesidad de, al menos mejorar la prevención y atención sanitaria, si no suspender los internamientos en pandemia. Continúa siendo preciso corregir situaciones de derechos vulnerados, como las denuncias de tortura o el internamiento de perfiles vulnerables como menores y solicitantes de asilo.
La sinrazón de la existencia de los CIE se hace aún más patente en contexto de pandemia global.
Foto: SJM- España