Este domingo 24 de septiembre hemos celebrado la Jornada Mundial de las personas Migrantes y Refugiadas, impulsada por el Papa Francisco bajo el lema «Libres de elegir si migrar o quedarse».
En esta jornada, que se viene celebrando desde el año 1914, el Santo Padre quiere promover una reflexión renovada sobre el derecho a no tener que emigrar, y el derecho a la elección de migrar con garantías seguras.
Este año, en Valladolid, participamos en la Caminata Diocesana de Hospitalidad, una forma de visibilizar la realidad de las personas migrantes, caminando junto a ellas. Un grupo de más de treinta personas salió del Seminario rumbo a la Parroquia Nuestra Señora del Prado, donde tuvo lugar la eucaristía presidida por D. Luis Argüello.
En la plaza de la Hispanidad hicimos una concentración para escuchar el mensaje de la Jornada.
«Dondequiera que decidamos construir nuestro futuro, en el país donde hemos nacido o en otro lugar,lo importante es que haya siempre allí una comunidad dispuesta a acoger,proteger, promover e integrar a todos, sin distinción y sin dejar a nadie fuera.»( Papa Francisco)
De ahí subimos hasta el barrio de Parquesol, utilizando el ascensor, escaleras o algunos campo a través. «Nosotros podemos elegir como subir, pero muchas personas migrantes no elijen como llegar a España o a Europa, encontrándose el dolor y la injusticia por el camino».
Finalmente, durante la eucaristía, las palabras de D. Luis Argüello nos invitó a reflexionar sobre la acogida y hospitalidad en nuestra iglesia. La misa terminó con la bendición de las imágenes de algunas vírgenes con devoción en países latinoamericanos. Sin duda emotiva la gran participación de personas migrantes de la parroquia y las palabras del párroco Jorge Fernández.
