Querida hija:
No sabes cuánto te extraño. Cada día que pasa se me hace más duro seguir tan lejos de todos vosotros, pero intento ser optimista y pensar que ya queda un día menos para volver a estar juntas. Me siento tan afortunada de poder oír tu voz y escucharte contar, orgullosa, cómo van creciendo tus pequeños… Ojalá llegue pronto el día en que digan eso de “abuela, pesada, deja de darme besos, que me vas a desgastar”.
Pero ¿hasta cuándo durará todo esto? No poder moverme ni salir de aquí para volver a estar con vosotros, que sois las personas más importantes de mi vida. Las fronteras no entienden de amor.
Ayer, en el parque infantil, una niña de unos cuatro años me preguntó qué personaje de dibujos animados era mi favorito. Al principio me quedé sin palabras, y respondí el primer nombre que me vino a la cabeza, de una serie que suelen poner en la casa donde trabajo. Pero no pude evitar preguntarme: ¿cuáles son los personajes favoritos de mis nietos? Estamos tan lejos que a veces siento que no los conozco.
Con la pandemia hay miles de familias separadas, que no pueden desplazarse a otras comunidades para reunirse con sus seres queridos. ¿Sabes? Esas familias son afortunadas. Porque pronto, en cuestión de días, semanas o meses, podrán desplazarse y viajar a otra localidad. Lo nuestro, ya sabes, va más despacio. Ayer se cumplieron 5 años desde mi llegada a este país, y el reloj sigue corriendo en nuestra contra.
Quizás con esta situación quienes me conocen acá entenderán mejor la soledad que siento al estar tan lejos de vosotros. Quizás sientan en sus corazones tan fuerte como yo en el mío lo necesario que es dar un abrazo a tus hijos. Y otro. Y otro después, sin mirar cuántos minutos han pasado desde el anterior. Quizás comprendan que somos muchas las personas que llevamos viviendo con esa separación física de nuestra familia durante años, y que nos faltarán muchos años más hasta encontrar la oportunidad de volver a nuestras casas.
Cada mes voy guardando una parte de lo que puedo ahorrar para poder comprar el billete de regreso a casa. Me he perdido muchos años de vuestras vidas, pero tengo fe en que algún día podremos crear recuerdos en familia.
Juntos. Para siempre.
Te quiere,
Tu madre.